HISTORIAS DE MEDICOS HIJOS DE PUTA
Ser médico no es para cualquiera, de la misma manera que ser hijo de puta no es sencillo. Ser médico es tan agobiante como divertido, tan descalificante como enorgullecedor. El camino de Hipócrates se construye con tolerancia a los vaivenes y una fuerte dosis de heroísmo (y a veces de heroína), por eso, éste libro no es apto para susceptibilidades extremas, nos aclara la autora -médica de profesión- porque a pesar del humor de su mirada, la radiografía de los colegas puede resultar molesta. «Si Ud. está dotado de esa cualidad; si es un médico delicado; si es puritano, estructurado o poco tolerante y, sin embargo, sigue leyendo, no lo tome como un ataque personal, ya que no es mi objetivo ofender a nadie. La realidad es un prisma, del cual cada uno ve la cara que puede (o quiere) ver. Aquí está la cara que veo yo; ocultarla es trabajo de cómplices, y la complicidad se parece demasiado a la cobardía. Sin embargo, como dijera el poeta latino, no hay mejor receta para corregir los errores que riéndose de ellos». Y Cassanddra lo sabe hacer de ese modo. Con sarcasmo, desparpajo, aguda observación y autocrítica. Éste es un libro tan revelador para galenos como para pacientes. Conozca los tipos de médicos, residentes, especialistas (¡y de pacientes y familiares de pacientes!). Toda una fauna -Y después decida su próxima consulta- pero mientras tanto, disfrute de este anecdotario donde encontrará a propios y a ajenos.